Burbuja bursátil

En el trading de criptomonedas, se habla de burbuja bursátil cuando los precios de las criptomonedas suben muy por encima de su valor intrínseco debido al exceso de especulación del mercado y entusiasmo de los traders. Este rápido incremento se intensifica a menudo por una combinación de publicidad mediática, influencia de las redes sociales y FOMO entre los traders.

Las características de una burbuja bursátil incluyen una rápida apreciación, en la que los precios de las criptomonedas se disparan en un breve período de tiempo; inversiones especulativas, donde los traders compran criptomonedas principalmente para obtener ganancias a corto plazo en lugar de por su valor fundamental o potencial a largo plazo; y publicidad mediática, donde la cobertura y promoción generalizada de las criptomonedas en los medios avivan la actividad frenética.

Un volumen de trading elevado, con un volumen inusualmente alto de operaciones a medida que más personas se incorporan al mercado, también contribuye a una burbuja bursátil. Así como factores psicológicos como FOMO, que empujan a más personas a invertir e inflan todavía más los precios.

La vertiginosa subida de precio de Bitcoin en 2017 es un ejemplo de burbuja bursátil, cuando su precio subió de alrededor de 1000 USD a principios de ese año a casi 20 000 USD en diciembre de 2017. A ello, le siguió una fuerte caída en 2018, coincidiendo con el lanzamiento de un gran número de nuevas criptomonedas a través de ICOs, que motivaron importantes inversiones especulativas y las consiguientes quiebras.

Las consecuencias de la explosión de una burbuja bursátil pueden ir desde la pérdida de confianza de los traders y el escrutinio por parte de Gobiernos y organismos reguladores, hasta una corrección del mercado, donde los precios de las criptomonedas se ajustan a niveles más realistas basados en su valor intrínseco.