Bifurcación

Las bifurcaciones se producen cuando hay una división en una red de cadena de bloques que deriva en la formación de dos versiones diferentes. Ocurre cuando las cadenas de bloques desean incorporar nuevas funciones a su cadena o solucionar problemas conocidos.

Dado que las redes de cadena de bloques son de código abierto, cualquier usuario puede contribuir al código y realizar cambios y mejoras, lo que puede generar actualizaciones en la cadena de bloques. Además, también se producen bifurcaciones si una cadena de bloques es jaqueada y tiene que adaptarse, que es lo que sucedió con Ethereum.

Otra razón que puede motivar una bifurcación son los desacuerdos dentro de la comunidad del proyecto. Si no se puede llegar a un acuerdo, los mineros a menudo utilizan bifurcaciones para crear dos versiones diferentes de la cadena de bloques. Las bifurcaciones se clasifican generalmente en bifurcaciones blandas o bifurcaciones duras, dependiendo de la magnitud de los cambios.

Una bifurcación blanda ocurre cuando se aplican nuevos cambios o actualizaciones que todavía son compatibles con las reglas vigentes, lo que significa que el sistema sigue pudiendo ejecutarse incluso tras la nueva actualización. Los nodos antiguos que no han realizado la actualización aún pueden comunicarse con los nodos actualizados, y los nodos actualizados siguen siendo válidos a los ojos de los nodos antiguos. Las bifurcaciones blandas implican cambios que no son radicales.

Las bifurcaciones duras son diferentes de las bifurcaciones blandas porque introducen cambios drásticos que afectan al protocolo de red en su conjunto. Se trata de un cambio permanente, en el que todos los nodos deben adaptarse a la nueva actualización y reglas; sin embargo, dado que no todos los nodos están de acuerdo, la bifurcación obliga básicamente a una división que da lugar a una nueva cadena de bloques con nuevos bloques y transacciones. Un ejemplo es la bifurcación dura de Bitcoin y Bitcoin Cash.